Vivimos tiempos donde la veracidad de la noticia paso un segundo plano, y lo interesante es mantener la verdad distorsionada de los intereses de los medios y los poderosos que los presiden.
No es dificil encontrar en las diferentes cadenas de noticias y los periodicos y paginas web que se dedican a informar, una serie de articulos relatados como verdades que lejos estan de la realidad, se distorsiona, se dicen medias verdades cambiandole el sentido veraz de la informacion y colocando siempre el ribete que favorezca al dueño o al editor de turno.
Lejos quedan aquellos días donde la verdad era el pacto de honor de un verdadero periodista, hemos llegado a lo que algunos llaman el mercenarismo de la comunicación, según me paguen yo informo.
Quienes estén enfrentados a la mediática o a la forma de actuar desde el punto de vista político, económico o financiero de los poderosos serán victima de el ensañamiento en su contra y se le inventara cualquier cosa para aniquilarlo en la mediática e inclusive desde el punto de vista humano.
Sobran los ejemplos de periodistas que han intentado sacar a la luz casos de corrupción o casos de narcotrafico y han sido victimas de amenazas y en el peor de los casos de asesinatos por encargo.
La ética en la información ha pasado a ser el cuanto hay para eso de la comunicación y debemos luchar hasta donde este a nuestro alcance para sanear y lograr adecentar nuevamente la tarea informativa veraz y oportuna, no haciéndose eco de la mentira sino resaltando la verdad lo cual es preludio de una verdadera justicia y un verdadero uso de una sociedad consciente.
Estamos ganados para dar la batalla por la verdad, no seamos pusilánimes en la defensa de mostrar la realidad de las cosas, enfrentemos con nuestro ímpetu la mentira y el engaño con fines inconfesables y lograremos el triunfo de la verdad, y como dice la palabra «ella os hará libres».